miércoles, 10 de febrero de 2010

Paredes acolchadas

Esdras miraba por encima del hombro a la masa que despreciaba. Sus ojos metálicos refulgían de puro asco. Su boca, qué boca tan buena para escupir, con esos labios finos, casi inexistentes, se torció en un gesto de profundo desagrado. El labio superior izquierdo, como si tuviera vida propia, se elevó espasmódicamente revelando unos dientes caninos y afilados.

Era tan consciente de su superioridad intelectual, incluso racial, que solo podía despreciarlos y sentir asco, porque eran cucarachas a sus ojos. Sabía que debía ignorarlos, sentía que estaba muy por encima, un millón de niveles más arriba en la escala evolutiva, pero no podía evitar mirarlos, no podía dejar de prestarles atención.

Disgustado, escupió por la ventana, entre los barrotes, hacia la masa de seres abyectos e inferiores que vivían ahí fuera. Se dió la vuelta, enfadado consigo mismo, y se dejó caer contra la pared acolchada...

Pasó el resto de la mañana refunfuñando, quejándose del mundo, insultando a las cucarachas. Cambió de pared, donde apoyar la espalda, cada pocos minutos, durante horas, feliz de engañar a las cámaras inexistentes.

Al cabo de un rato, se abrió la puerta. Sintió un pánico irresistible, era la hora maldita, el momento más temido. Se levantó y corrió hacia la esquina más alejada de la puerta.

El enfermero entró sonriente, con la sonrisa que los lobos dedican a los becerros, empujando una mesita blanca con ruedas. Cerró la puerta parsimoniamente y susurró "por fin solos, cariño". Esdras comenzó a sudar copiosamente.

Es la hora de la comida, dijo burlón. Es la hora de la medicación, rió. Sus ojos se afinaron con anticipada satisfacción, a la vez que su lengua viscosa humedecía los labios gordezuelos.

Con un movimiento calculadamente lento, sádico, el enfermero Orente se llevó la mano al bolsillo de la bata y extrajo un pepino acerado de palmo y medio.

Esdras comenzó a sollozar...

2 comentarios:

Winthrop Pendleton dijo...

¿Le preparó una ensalada y las hacía fatal?

moncho dijo...

Hola MGA,haca mucho tiempo que no tenía noticias suyas(desde Debate21).
Parece que seguimos en forma.Me alegra que los patriotas y románticos en general sigan en pié en estos tiempos egoistas y cobardes.
Viva la Patria.
Moncho